jueves, 8 de mayo de 2008

En Chile trabajan cerca de 200 mil niños y un 64% pertenece a los sectores más pobres

Un enérgico llamado a terminar con el trabajo infantil hizo el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en víspera de una nueva celebración del Día Internacional del Trabajo.
Según la Primera Encuesta Nacional de Trabajo Infantil y Adolescente, realizada por la OIT y el Ministerio del Trabajo, en Chile trabajan cerca de 200 mil niños, niñas y adolescentes; y el 64% de ellos pertenecen al 40% más pobre de la población.
En opinión de UNICEF la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por Chile en 1990, obliga a los países a adoptar las medidas legales, sociales y educacionales que eviten que los niños y adolescentes trabajen.
Para UNICEF, una de las principales consecuencias que tiene el trabajo en los niños, es que muchos de ellos abandonan los estudios por sus obligaciones laborales y quienes no lo hacen, tienen un mal rendimiento. "Estudiar y trabajar han demostrado ser actividades incompatibles. Las jornadas laborales no les permiten tener tiempo para estudiar y descansar, de manera de llegar a clases en condiciones de aprender, estar atentos y tener éxito en los estudios".
En este contexto, UNICEF señaló que un 21% de los niños y adolescentes que trabajan más de 21 horas semanales no asisten a la escuela. Similares problemas de abandono escolar presentan aquellos que tienen un rol activo en los quehaceres del hogar. Un 33% de ellos están fuera del sistema educacional. "El trabajo infantil reproduce la pobreza, no la soluciona. Un niño que trabaja y deja estudiar para mejorar un poco las condiciones de vida de su familia, será un adulto laboralmente poco calificado".
Un dato relevante en este aspecto, es el que señala que el 64% de los niños y adolescentes que trabajan pertenecen al 40% más pobre de la población. "El trabajo infantil surge principalmente bajo condiciones económicas marcadas por la pobreza. En muchas oportunidades los niños trabajan porque sus padres no tienen empleo o los salarios que reciben no alcanzan para cubrir las necesidades familiares".
A lo anterior se puede agregar que un 35% de las niñas entre 5 y 17 años, que viven en hogares con jefatura femenina, realizan quehaceres domésticos, mientras que el 28% de los hombres de este grupo etáreo ayuda a la madre buscando ingresos fuera de la casa.
Las ocupaciones más frecuentes de los niños, niñas y adolescentes que trabajan son: empaque de mercaderías en supermercados, trabajo en la calle (promotores, lavadores de autos, etc.), comercio callejero ambulante, trabajo doméstico, talleres manufactureros, producción agropecuaria, actividad pesquera de tipo industrial y tradicional y explotación minera.
UNICEF señaló que según estudios propios, los niños trabajadores desean ser profesionales universitarios y no quisieran que sus hijos trabajen.
Fuente :La Segunda Internet

No hay comentarios: